También le advirtiron de una escalada de tomas de terrenos en el Conurbano. Primero fue en La Plata y luego con dos mil familias se dio el mismo caso en Merlo. Sus asesores temen un efecto cascada en otros distritos, más aún en los que hay recambio de intendentes. Frente a este panorama, Vidal abrió el paragüas. Para ello, ordenó elaborar un plan de contención social en las zonas más pobres. El fantasma de los saqueos ronda por su cabeza.  La mandataria ruega que su jefe polìtico sea ungido presidente, para que le otorgue de manera inmediata la ayuda económica que sufre la Provincia en el reparto de los fondos de coparticipación. Caso contrario, se las verá en figurillas para hacer frente a las obligaciones, acorralada por un peronismo hambriento y sangrando por la herida, después de haber perdido su principal bastión.
No obstante, Vidal avanza a paso firme e instaló otro frente ríspido. Quiere una reforma polìtica para limitar las reelecciones, algo que despierta escozor entre los caciques del conurbano.
La dirigente macrista también necesita una nueva ley de ministerios, para modelar un gabinete a su medida, y apoyos para designar las autoridades de las cámaras de la Legislatura, donde el kirchnerismo espera dar batalla.
LAS USURPACIONES DE TIERRAS TAN TEMIDAS
En lo que tiene que ver con las usurpaciones de tierras, Vidal le confesó sus temores a Margarita Stolbizer, cuando la visitó en su casa y se fotografiaron en la previa del balotaje. “Creo que pueden haber más tomas. Sería un grave problema”, le manifestó a su vecina de Castelar y reciente candidata presidencial.
Se comenta que el caso ocurrido en Merlo fue fogoneado por Raúl "El Vasco" Othacehé, intendente desde 1991 y derrotado en las primarias por Gustavo Menéndez. Daniel Scioli intervino, pero nada cambió y las dos mil familias nunca abandonaron los terrenos. 
En La Plata se dio idéntica situación tras el derrumbe del bruerísmo. En ambas comunas el diagnóstico financiero es terminal y difícil de revertir. Los recientemente electos jefes comunales heredan escenarios explosivos, con súper población de empleados y abultado déficit. 
El nuevo ministro de Seguridad, Cristian Ritondo, hombre que viene del riñon peronista, que conoce el conurbano y el pulso de los caciques polìticos, olfatea  que ni bien asuma Vidal, la toma de terrenos podría extenderse y convertirse en una bomba de tiempo al juntarse con las fiestas de fin año, fecha siempre elegida por organizaciones sociales para exigir ayuda del Gobierno.
La gobernadora electa tiene todavía en su retina el recuerdo de la dramática y trágica toma del Parque Indoamericano, episodio que la dejó marcada en la Ciudad de Buenos Aires y que la tuvo al frente de una de las crisis más graves que sufrió el macrismo.

"UNA CAPERUCITA QUE SE PARECE AL LOBO"

Las señales de alerta se suman a la tensión que se percibe por los reclamos de los docentes. El kirchnerista Roberto Baradel, pidió un aumento del 40 por ciento. También suenan tambores de guerra por el lado de los estatales de Carlos Quintana, el histórico líder de UPCN de La Plata. En la fila además se colocó el nuevo titular de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) bonaerense, Oscar De Isasi, quien advirtió que si la gobernadora electa, "intenta aplicar políticas neoliberales, echar gente y desfinanciar al Estado", saldrán "a la calle para impedirlo".
Las alarmas sindicales se dispararon además por las desafortunadas declaraciones del vicegobernador, Daniel Salvador, que le jugaron una mala pasada a Cambiemos. Es que tras afirmar que cuando asuma junto a Vidal en la Provincia reducirán de manera “importante” el personal de la administración pública, el radical luego tuvo que desdecirse y negar recortes masivos, ante un urgente llamado telefónico desde el cuartel macrista.
Según pudo saberse en fuentes inobjetables, estas luces de alerta han puesto en pie de lucha a los sindicatos locales. En algunas sedes ya se cocina a fuego lento un plan secreto. Tiene que ver con elaborar acciones tentativas frente a un eventual escenario de choque "si amagan con despidos". Pudo saberse que ya hay equipos de difusión trabajando en "campañas de alto voltaje y hurgando en cada detalle de la vida de Vidal, buscando flancos débiles", admitió un informante. Uno de los formatos sería atacar mediante afiches con el argumento que la dama  de la sonrisa "no era Heidi como pintaba, sino una bruja". O que " lo que asomaba  como caperucita roja, se parece al lobo". Son ideas que barajan los asesores gremiales, quienes además han puesto  foco en los antecedentes de la funcionaria porteña. Recuerdan por ejemplo que se calzó las botas de lluvia después de las inundaciones bonaerenses para recorrer  los municipios con agua, pero por veredas secas, para luego divulgar la foto. Sostienen que "detrás de su expresión felíz, se oculta una personalidad fría, calculadora y avasallante". Detectaron que en  las inundaciones del 2 de abril del 2013 Mauricio Macri y Horacio Rodríguez Larreta se habían tomado vacaciones. Ahí, como en la represión en el Borda, fue Vidal quien se calzó un piloto amarillo y salió a responder por los ocho muertos en el temporal en la Ciudad de Buenos Aires.

LE DIO LA ESPALDA A LA NIÑEZ

También aluden que  no le tembló el pulso cuando asumió en el 2008 el Ministerio de Desarrollo Social porteño después de tomarse licencia por embarazo. Hacía dos años que la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia reclamaba ante el Superior Tribunal de Justicia de la Ciudad de Buenos Aires que todas las mamás tengan jardines maternales donde dejar a sus hijos. Pero ella hizo oídos sordos. Recién por orden judicial, el 15 de febrero del 2011, Vidal aceptó la orden de construir salas para los 6.000 bebés y niños/as sin vacantes. Entre otras cosas, visualizaron además que  tuvo paros de la línea de atención de la Dirección de la Mujer por malas condiciones laborales para atender a víctimas de violencia. "Creemos que detrás de esta mujer se esconde una dama de hierro, capaz de pulverizar empleos y salarios. Si es así, le haremos la vida imposible", disparò un alto dirigente.
ALAK VOLVERÍA AL CENTRO DE LA ESCENA
Como parte de su estrategia, los sindicatos locales, han fijado prioridad en recuperar el control polìtico de la ciudad de La Plata. Piensan que el hombre con más experiencia para colocarse el traje de nuevo jefe del PJ, sería el ex intendente Julio Alak.

Por estas horas, en el peronismo están convencidos que la gobernadora electa  fabricó demasiados frentes para marcar la cancha. No es para menos, Vidal anunció que una de sus primeras medidas será una reforma electoral, que impida las reelecciones indefinidas de los intendentes y que incorpore la boleta electrónica y el sistema D’Hont para elegir legisladores provinciales. 

Si bien es cierto que el PRO no tiene mayoría en la Legislatura bonaerense, Vidal logró el visto bueno de Sergio Massa y Stolbizer de apoyar la movida, como en la aprobación del nuevo presupuesto. Además, el peronismo golpeado por la primera derrota en 28 años no estaría en condicione de resistir una reforma muy reclamada por la sociedad. Vidal  planea  también avanzar en una ley de ética pública que permita transparentar información del gobierno bonaerense, nada fácil de conseguir. Otro de los items que inquieta a la gobernadora es la situación financiera de los 78 municipios con intendentes nuevos, quienes el viernes fueron recibidos por el presidente del Tribunal de Cuentas, Eduardo Grinberg. La mayoría espera una herencia calamitosa, con abultadas cifras de contratados pasados a planta permanente por los alcaldes salientes.

LA PAPA CALIENTE DE LA PARITARIA MUNICIPAL

Otro frente explosivo que puede venir y que la gobernadora y Massa compartieron en una reunión privada se centró en una herencia que dejó Daniel Scioli. Se trata de la ley 14.656 de paritarias municipales, sancionada a fines de 2014 y promulgada por el gobernador saliente el 6 de julio pasado, para que comience a regir a más tardar el 6 de enero. La normativa establece el régimen marco de empleo municipal, que garantiza derechos laborales demorados por décadas por los barones del conurbano, que de hecho podían regular por decreto la relación con sus empleados. La regla era clara: a mayor fortaleza política del intendente, menor margen de negociación con sus empleados. La nueva norma fija cupos mínimos de contratados (20%), restablece el adicional por antigüedad (el ex gobernador Eduardo Duhalde había quitado un 2% a esa cuota) y, básicamente, garantiza que haya negociaciones paritarias individuales en cada municipio.

Jorge Joury es licendiado en Ciencias de la Información. Su correo electrónico es [email protected]. Quienes quieran consultar su blogs, puden dirigirse al sitio: Jorge Joury De Tapas