Los dueños de Pier Chic y sus patovicas habrían pedido no ir presos por el ataque a Delfina
Los dueños del boliche Pier Chic y los patovicas que casi asesinan a una chica durante una fiesta ese local del Camino Centenario y 508, buscan la forma de no ir presos y seguir en libertad hasta que se resuelva el lento proceso iniciado a partir del salvaje ataque a Delfina Crocce. Para eso habrían presentado un pedido de exición de prisión. Mientras tanto, dos testigos le dijeron al fiscal Fernando Cartasegna que en el momento del hecho les pidieron con desesperaciòn al supuesto empleado de seguridad de Pier Chic que no arrojara la botella que casi mata a Delfina.
En tanto, fuentes del Sucapra revelaron que el boliche de Camino Centenario y 508 sería "unos de los tres establecimientos que se niegan a contratar personal de seguridad profesionalizadoy legalmente registrado. Usarían patovicas que reclutan en los gimmasios". Mientras tanto, los responsables de la agresión a la chica Delfina Croce en el boliche de Camino Centenario y 508 siguen impunes. Pudieron haberla matado, por lo que son asesinos en potencia. Los dueños del local, donde esa noche también golpearon salvajemente a otra mujer, declararon ante el fiscal "espontáneamente". La sombra del poder político flota, siniestra, sobre un episodio aberrante que pareciera ir camino a la impunidad. "Usan tipos que van a buscar a los gimnasios. Se niegan a contratar personal del Sucapra debidamente registrado y entrenado. Es uno de los tres boliches de La Plata que no le dan bola a la ley", disparó una fuente del Sucapra, el gremio que nuclea al personal de seguridad en espectáculos
Mientrras tanto, el fiscal Fernando Cartasegna, a cargo de la causa que investiga el terrible botellazo que recibió una chica de 25 años en la puerta de un boliche de Gonnet, les tomó declaración a Marcelo Fernández Barón y Juan Laborde, quienes, según señala el diario El Dia, "se presentaron espontáneamente en representación de la empresa para aportar elementos que puedan colaborar con el esclarecimiento de los hechos". En su declaración, los supuestos dueños de Pier Chic (que tendrían también vinculación con el boliche Wilkenny, un lugar muy visitado por el poder político de la Ciudad) habrían señalado que "también hay tres empleados de seguridad del boliche que resultaron heridos en medio de los serios incidentes que terminaron con las graves lesiones sufridas por la joven Delfina Croce". De acuerdo con las declaraciones testimoniales que brindaron responsables del local, "todo se inició por la inconducta de un grupo de jóvenes dentro del boliche y derivó luego en los incidentes ocurridos afuera". Afirmaron que en todo momento "se buscó preservar la integridad física de las personas que se encontraban en el local al ver que en las inmediaciones se producían hechos de violencia en los que resultó herida la joven". Más allá de esto, la realidad muestra otra cosa: los asesinos en potencia, siguen impunes.