viernes 19 de abril de 2024 - Edición Nº3859
Diario Full » SOCIEDAD

Entre caníbales: por no tener obra social una chica platense casi tiene que parir en la calle

Carolina, una chica de 20 años de Altos de San Lorenzo recorrió tres hospitales públicos donde le dijeron que no había lugar. Y en una clínica privada no la atendieron por no tener obra social. Gracias a un colectivero nació Aisha, con tres kilos setecientos.


A las 12 de la noche fue hasta el Hospital San Martín. No la recibieron porque no estaba en trabajo de parto y la mandaron al Gutiérrez, donde la tuvieron en observación y a las 2 de la mañana la mandaron para la casa. Ayer amaneció con dolores y cuando se pudo mover pidió ayuda a una vecina que la llevó hasta el Gutiérrez”.

“A las 2 de la tarde llegó al Hospital Gutiérrez pero no la admitieron porque todavía no estaba en trabajo de parto. Le dijeron que se vuelva a su casa o que elija entre el hospital de Romero o el de Gonnet. Cuando íbamos camino al de Romero en un colectivo de la Línea 215, se le empezaron a acelerar las contracciones. El chofer pidió a los pasajeros que bajaran para poder acercarla hasta algún hospital”, contó Carolina.

“El micro estaba en 7 y 41, un policía le dijo que vaya hasta 7 y 43 en la Clínica Central pero la rechazaron porque Carolina no tiene obra social. En el mismo colectivo la llevaron hasta el Rossi, donde ni siquiera la revisaron y le dijeron que fuera hasta el Gutiérrez de nuevo. Ella ya tenía ganas de pujar”, agregó.

Entrada la tarde, Carolina volvió al Gutiérrez gracias a Roberto, el chofer de la 215 que no dudó en ayudar a esta mamá primeriza. A pesar de que ya había perdido el tapón mucoso, le pidieron que se quedase sentada en la guardia común porque no había camas en maternidad.

“Estuvimos hasta las 7 de la tarde, cuando llegaron algunos periodistas la dejaron pasar a la guardia de maternidad. Primero esperaban que desde el Ministerio contestaran si había lugar en el Romero, pero nunca respondieron. A las 11 de la noche le consiguieron una cama y a las 5 de la mañana nació la bebé. El parto se complicó más de la cuenta porque por los nervios que pasó la mamá la beba se contrajo y no quería salir”, aseguró Luján.

La bebé llamada Aisha finalmente nació bien, con un peso de 3,765 kilos. “El chofer del micro se comportó en forma muy generosa. A pesar de que no era su familiar, nos ayudó y nos llevó a distintos hospitales para que pudiera nacer mi sobrina. Fue una situación riesgosa y muy estresante”, concluyó la tía de la bebé.

OPINÁ, DEJÁ TU COMENTARIO:

NEWSLETTER

Suscríbase a nuestro boletín de noticias

VIDEOS