En las fiestas de fin de año de 1963, Perón había brindado con sus amigos - incluido Carlos Acuña, notable cantor de tangos - por su último año fuera de la Argentina. A partir de ese momento las versiones y/o anuncios sobre su retorno se hicieron con mayor frecuencia y precisión.
El Movimiento Obrero conducido por el metalúrgico Augusto Vandor, desarrolló en 1963 un plan de lucha y lo incrementó en 1964 con un método inédito en Argentina: la toma de fábricas y establecimientos laborales. Miles de lugares de trabajo en mayo/junio fueron ocupados pacificamente durante días, con una sincronización y organización casi perfectas, para envidia de los cuadros marxistas que siempre soñaron conducir un proceso de esas caracteristicas.
Los distintos sectores de la Juventud Peronista en especial el Comando de Organización (Alberto Brito Lima), el Movimiento de la Juventud Peronista (Envar El Kadri-Jorge Rulli-Hector Spina), la J.P. Revolucionaria (Gustavo Rearte) Movimiento Nueva Argentina (Dardo Cabo), todo el año realizarón movilizaciones, marchas,actos relampagos y todo tipo de agitación callejera promoviendo el retorno.
Perón reivindicaba su promesa de regresar y el gobierno radical del Dr. Illía contestaba con ambiguedad "Es una cuestión del señor Perón " declaraban .
En Octubre otro episodio agitaría el ambiente político: la visita del Presidente de Francia Gral. Charles De Gaulle. El peronismo consideró la llegada del héroe de la Resistencia -de excelente relación con Perón en esa década - como la antesala del regreso del Líder.
A instancias del exilado se lo recibía con las consignas "De Gaulle-Perón, un solo corazón" o "De Gaulle-Perón Tercera Posición". En Buenos Aires y Cordoba ciudades que visitó el presidente galo "navegó en un mar peronista" rodeado de manifestaciones masivas de militantes justicialistas.
El 17 de Octubre se celebró en Pza. Once con un discurso dirigencial ceñido exclusivamente al operativo retorno, al término del acto hubo una violenta represión por parte de la Policía Federal.
"Alea Jacta Est" (la suerte está echada) seguramente pensó el General cuando a las 1,45 hs de España del 2 de diciembre de 1964, junto a Vandor, Framini, Iturbe, Lascano, Delia Parodi y Jorge Antonio, embarcó rumbo a Montevideo con escala previa en Río de Janeiro.
A las 4 de la mañana al presidente Illía lo despertó un llamado telefónico " Señor, nuestro embajador en Madrid acaba de informar que Juan Perón se halla en vuelo hacia Argentina en un avión de Iberia" el presidente inmediatamente instruyó al canciller Zavala Ortiz que entablara negociaciones con el gobierno militar de Brasil para abortar la llegada del viajero.
A las 9,45 hs el Douglas DC8 tocó tierra carioca e inmediatamente fué rodeado de fuerzas militares. Una hora después un funcionario de la cancillería brasileña comunicó a la comitiva que deberían regresar a España, " A quién se debe ésta orden" inquirió Perón "Al presidente del Brasil" fué la respuesta, Perón se niega " soy pasajero en tránsito y me protege el derecho internacional, nadie puede esgrimir el derecho a obligarme a descender de este avión que por otra parte es territorio español".
Ante la negativa se amenaza con remolcar el avión a un hangar, Perón y sus acompañantes abandonan la aeronave y son retenidos 11 horas en El Galeao.
Permanece en Río hasta las 23,57 horas de Brasil, cuando agilmente sube las escalerillas del mismo avión para retornar a Madrid, clausurando así un nuevo capítulo de su historia política.
Antes produjo esta declaración "En cumplimiento de mi promesa viajaba hacia nuestro país cuando insolitamente, al llegar a Río de Janeiro fuí detenido conjuntamente con nuestros compañeros y demás pasajeros que viajaban"
La cancillería brasileña de inmediato dió a conocer el siguiente comunicado: En atención a un pedido argentino y dentro del más alto espíritu de colaboración y amistad existente entre los dos países, el gobierno brasileño convino en detener en Río de Janeiro el viaje que el señor Juan Perón realizaba en un avión de Iberia".
Se había consumado un nuevo atropello -esta vez internacional- a las libertades políticas de la mayoría del Pueblo Argentino en la persona de su conductor.