El régimen de Guinea Ecuatorial ha intensificado su represión contra los habitantes de la República de Annobón. Como castigo por la reciente pueblada que impidió el traslado de dos delegados locales a Malabo, el régimen comenzó a detener a personas y a confiscar sus teléfonos para evitar cualquier registro de los hechos. Este operativo se llevó a cabo casa por casa, resultando en más de treinta detenidos solo en las últimas horas.

La represión ha desencadenado una nueva movilización masiva frente a las dependencias del régimen en la isla de Annobón, donde los manifestantes exigen la liberación inmediata de los detenidos y el cese del operativo represivo.

El General Pedro Eyene Nguema, conocido por su implicación en la explosión de las instalaciones de Nkuantoma en Bata, ha amenazado con disparar a cualquier persona que se encuentre en las calles si la muchedumbre no abandona el espacio del gobierno ocupacional en dos horas.

«Eyene Nguema dio a la población concentrada dos horas para que abandonen el lugar de concentración, si no, dará orden de fuego a sus militares. La población no se movió», explicó un isleño.

Fiel a sus amenazas, el régimen ha comenzado a ejecutar las represalias anunciadas. Esta mañana, alrededor de las 10.30 hora local, los militares, fuertemente armados, iniciaron un operativo puerta a puerta arrestando a los mayores y ancianos que firmaron un documento en el que expresaban su descontento en nombre del pueblo de Annobón por la destrucción causada por la empresa SOMAGEC, vinculada al dictador Teodoro Obiang Nguema Mbasogo, en la isla.

Todo comenzó con una carta al régimen ocupacional solicitando el cese de las explosiones en Annobón, que están poniendo en peligro la estructura de la isla y provocando el colapso de viviendas. Las detenciones arbitrarias, torturas y violaciones de los derechos humanos están ocurriendo en estos momentos en Annobón, donde la población civil está siendo brutalmente reprimida por exigir el fin del uso de explosivos en la isla.

“El pueblo indignado de Annobón resiste el día de hoy las amenazas, detenciones arbitrarias y la orden de Obiang Nguema de abrir fuego contra la población. El general asesino de Kuantoma está con un fusil de asalto y el gobernador Faustino Edu Michá con un lanzallamas apuntando al pueblo ambô. Estamos en estado de emergencia”, explicaron desde el gobierno de la República de Annobón.