El episodio tuvo lugar mientras el periodista Jonatan Viale conducía en vivo su programa en los estudios del canal. "Hicieron un desastre, tiraron todo. Estuvieron 50 metros adentro del canal. Rompieron las bicicletas de los laburantes, los Martín Fierro, los trofeos. ¿Con qué necesidad? ¿Qué tiene que ver un productor o un camarógrafo?", denunció visiblemente conmocionado el conductor. Desde las imágenes difundidas por el propio medio se observa el ingreso violento, con cristales rotos y elementos arrojados por el hall central. También fueron atacados miembros del personal de seguridad y empleados del canal.
El vocero presidencial Manuel Adorni fue uno de los primeros en pronunciarse públicamente tras el ataque. Desde su cuenta de X expresó: "Mi solidaridad con todos los trabajadores de TN que han sufrido el ataque de un grupo de inadaptados sociales quienes parecen haber querido 'defender la democracia' destruyendo a piedrazos todo lo que han podido. Fin". A través de un comunicado, la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA) repudió "enfáticamente el accionar de los manifestantes que ingresaron a las instalaciones del canal TN para provocar destrozos". Y reclamó una investigación urgente.
El organismo además pidió el refuerzo de la seguridad para los medios de comunicación y periodistas. El ataque coincide con una vigilia de militantes que se instaló frente al domicilio particular de Cristina, a pocas cuadras del canal, donde la ex mandataria permanece tras recibir en la sede del Partido Justicialista el fallo definitivo de la Corte Suprema, que dejó firme la condena por fraude a la administración pública. Allí mismo se especula que podría cumplir prisión domiciliaria, tal como solicitó su defensa.
El clima frente a la residencia de la ex presidenta se tornó cada vez más agitado con el correr de las horas. La presencia de militantes se multiplicó, en una mezcla de apoyo y resistencia. Cristina y su hijo Máximo salieron al balcón para saludar a los manifestantes que permanecen en vigilia. Según trascendió, en el interior de la vivienda se llevó adelante una reunión de emergencia con los principales dirigentes del kirchnerismo, en una suerte de "comando político" improvisado ante la nueva etapa que se abre.