Pocos días después de haber recortado viáticos y gastos de representación de su sueldo por significar una “cuestión inmoral”, el joven alcalde de Cambiemos decretó aumentos de entre el 98 y el 70 por ciento en los sueldos básicos de la planta política de la municipalidad. Con la firma del decreto 250/16, Yeza instrumentó las mejoras a 14 de sus funcionarios más cercanos. Para la oposición, "es amiguismo puro".
Estas dádivas cayeron muy mal en la población local, especialmente en los comerciantes, que viven el peor verano de la última década por la escasa presencia de turistas. Algunos calculan que hubo un 40% menos que el año anterior. El motivo principal fue lo barato que hoy aparece Brasil al cambio de moneda y los precios abusivos que se observaron sobre todo en enero en la denominada costa verde.
UN PAISAJE DE ABANDONO
Además, los turistas que se animaron a ir a Pinamar, describieron a las calles como de un abandono total, nunca visto. " Un paisaje lunar con verdaderos cráteres". Yesa se cubrió señalando que la administración anterior le dejó una sola máquina para nivelar las calles de arena en el bosque y que no alcanzaba a cumplir con tántos requerimientos. Pero hay quienes señalan que "no tuvo siquiera la visión de alquilar motoniveladoras para presentar un escenario más decoroso, sabiendo que el distrito entraba en temporada".
Hoy la comidilla en Pinamar es el "salariazo" de Yeza para sus amigos. Además del incremento sobre el básico, el intendente sumó al sueldo de sus colaboradores dos mejoras de 16 mil pesos cada una en concepto de “bonificación por función” y “bonificación por disponibilidad horaria”. Por ejemplo, diarios locales difundieron el recibo de sueldo del secretario de Salud de la municipalidad, Jorge Luis Benítez, en el que constan ambos aumentos, que completan un sueldo de 42 mil pesos en mano. Yeza explicó que la remuneración corresponde “a los funcionarios que casi no duermen y tienen una dedicación exclusiva en temporada alta”. “Había un desfasaje –agregó el intendente–. En Pinamar, cerca de 380 empleados municipales ganan arriba de 21 mil pesos, lo que hicimos fue equipararlos con los cargos jerárquicos, que pasarán a ganar lo mismo”.
NADA DE TRANSPARENCIA
Hace un mes, el propio intendente aseguró que los sueldos representaban “91 por ciento del presupuesto” y presentó su propia quita como un gesto de austeridad frente al estado crítico de las finanzas del municipio, que adjudicó a la gestión saliente. Ante la pregunta de cómo había encontrado el municipio, respondió, entre risas: “Con un café con leche y dos medialunas”. Con ese planteo, Yeza se negó durante el principio de su gestión a otorgar recategorizaciones pendientes a los empleados municipales y la actualización del 15 por ciento sobre el básico que firmaron en octubre del año pasado.
Con los guardavidas intentó algo similar: sin paritarias, la Asociación de Guardavidas de Pinamar (AGP) logró que el Ministerio de Trabajo de la provincia dictara la conciliación obligatoria con el municipio, que se negaba a discutir un aumento salarial. “Se manejan con una doble vara, igual que el gobierno nacional, del mismo signo político del intendente: transfieren recursos a los que más tienen mientras recortan a los trabajadores”, sostuvo el concejal del FpV, Gregorio Estanga.
Otro de los cuestionamientos sobre los aumentos es la falta de transparencia. Mientras en el sitio web de la intendencia se muestra “la agenda pública” del intendente, con sus reuniones diarias, el decreto que instrumenta los incrementos salariales de los funcionarios no fue publicado en el Boletín Oficial. “A pesar de que se muestran como una gestión transparente, aún no publicaron el decreto y las planillas de los sueldos no fueron actualizadas. Sabemos que van por más de 400 decretos que aún no conocemos, pero desconocemos hasta dónde puede llegar esto”, denunció el concejal.
VERANO CON OLAS
El verano tuvo mar picado con otros escándalos en el coqueto balneario. Uno de ellos fue la destitución a mediados de enero del director de Seguridad en Playa, Germán Sevrain, quien denunció que la intendencia pretendía designar a dedo a seis guardavidas, eludiendo el llamado a concurso y en contradicción con la ley provincial que regula la actividad. Antes de dejar el cargo, Sevrain presentó un informe, que llegó a manos de los concejales opositores, donde pone de manifiesto los manejos de Yeza. “Al día de hoy se encuentran personas trabajando que no se han presentado a realizar el mismo, por lo tanto se está violando la ordenanza 3938/11”; “no fue respetado el compromiso político tomado en campaña sobre el estricto cumplimiento de leyes vigentes sobre el desarrollo correcto del operativo de seguridad en playas”, y “cabe aclarar y debo desmentir que los guardavidas al día de la fecha cobren 33 mil pesos como se dijo en los medios de prensa”, son algunos de los puntos que figuran en el informe que presentó el ex funcionario, nombrado y destituido por el propio Yeza en poco más de un mes.