La desaparición de un niño de 4 años, sobrino del Gato Sessa, en la nochebuena disparó una desesperada
búsqueda de la que participaron familiares y vecinos de la criatura en una zona entre
Arana y Parque Sicardi que más allá del buen final que tuvo la historia encendió la
inquietud por la cantidad de piscinas sin cerco perimetral que hay en la zona, en 637 y

Marcos Sessa, padre del niño y hermano de Gastón, el ex arquero de Gimnasia quien dijo haber vivido una verdadera pesadilla.
"Cerca de las 22.30 de la noche mi esposa notó que no estaba uno de los mellizos, de 4
años. Ella estaba regando el parque y en un segundo lo perdió de vista. Nos
desesperamos en salir a buscarlo. La zona está llena de quintas con piletas y el temor
nos invadió a todos. Salieron los vecinos con linternas a buscarlo, con mucha angustia.
Fue un momento terrible porque de noche no hay mucha luz en el barrio", contó Sessa.
La búsqueda se extendió por todo el barrio hasta incluyó a una familia de turistas
brasileños que habían alquilado una quinta en la zona.
Tras más de una hora de búsqueda comprobaron que el niño estaba durmiendo en la
camioneta del padre.
"Mientras la madre regaba, el nene se subió a la camioneta a jugar con el volante y se
quedó dormido", dijo Sessa.
Más allá de la anécdota con final feliz, el susto puso otra vez en el tapete la necesidad de
extremar cuidados con las piletas sin cerco de seguridad.
"Todos pensamos lo peor porque es común que las piletas no tengan cerco y eso es algo
que debemos cambiar", dijo Sessa, agradecido por la inmediata movilización del barrio y
apenas repuesto del susto.