viernes 26 de abril de 2024 - Edición Nº3866
Diario Full » POLITICA y POLITICOS

Moyano le marcó la cancha al "compañero" Presidente

Por Jorge Joury


Mauricio Macri a lo que más le teme, es a terminar como Fernando De la Rúa. Quiere que su poder no se diluya y hará todo lo posible para mantener la vara bien alta. Con una base electoral volátil, una coalición en construcción y sin mayoría en ninguna de las cámaras del Congreso, el Presidente está obstinado en exhibir su fortaleza . Aunque levanto olas y tuvo que retroceder,  encontró una buena oportunidad para demostrarlo con la designación de los dos candidatos a integrar la Corte. Ahora, con el levantamiento del cepo redobló la apuesta, pero el panorama en este caso es más inquietante. Sus jugadas forman parte de un mosaico económico complejo, cuyo éxito depende en última instancia, de la confianza que inspiren las medidas. Macri no está solo en sus decisiones. Hay quienes sostienen que  lo tiene a Ernesto Sanz en las sombras, que oficia de una suerte de asesor sin cargo. El radical no se ha retirado de la política, como se dijo. Llevan su sello la catarata de decretos de necesidad y urgencia que firmó el Presidente en apenas una semana, y la polémica decisión de designar a los dos jueces de la Corte Suprema de Justicia en comisión.

GOBERNABILIDAD VIA DECRETAZOS

El mendocino  le aconsejó a Macri primerear a la oposición. Aprovechar el receso del Congreso para generar mayor gobernabilidad a través de medidas que se concreten rápidamente vía DNU. Así, el Gobierno se evitará, por lo menos hasta marzo, lo que será una negociación desgastante, especialmente con el peronismo, que todavía no definió su  perfil . En términos concretos, el reordenamiento de la economía es el campo donde terminará despejándose la verdadera incógnita sobre el poder de Macri. Ya logró una meta. Con el fin del cepo, la Argentina no se derrumbó y los únicos que perdieron el trabajo fueron los "arbolitos". Pero Macri sabe que lo que viene será espinoso. Frenar la inflación es la batalla más dura. Tiene que lograr que los empresarios desactiven la bomba que le pusieron a los precios para que no se derritan los salarios. La prueba de fuego la tendrá por abril del año próximo, cuando se negocien las paritarias. Se sabrá entonces si la salida del cepo que duró cuatro años termina con éxito. Caso contrario, el destino mandará sus telegramas intimidatorios. 

UN AROMA A LOS AÑOS 90

Desde el ámbito sindial están velando las armas. Hugo Moyano ya no ve a Macri como el "compañero" Presidente. Alertó que sus medidas económicas tienen "un aroma a los años 90". También expresó que le molesta la hipocresía : ”Espero que no hayan sacado el cepo al dólar para ponérselo a las paritarias”, dijo en tono de advertencia.
En las últimas semanas la inflación ha sido muy alta y el líder cegetista no está dispuesto a que los trabajadores pierdan el poder adquisitivo de sus salarios durante las negociaciones que comenzarán el año que viene.
“En noviembre registramos un salto en los precios de 28% y en diciembre seguro que va a ser de 30 o más", cerró Moyano. 

Hay que decir que el Presidente recibió a Moyano poco antes de asumir. Fue el único sindicalista con el que Macri se reunió cara a cara y del que divulgó detalles. Pero a pesar de este acercamiento el líder gremial blanqueó delante de sus pares de la CGT que él "no se casó con nadie" y se mostró decidido a activar los reclamos salariales del sindicalismo peronista. Su aliado sindical, el gastronómico Luis Barrionuevo también se ubicó frente al muro de los lamentos y agregó que pedirá el 50% de aumento en la futura negociación salarial.  

A LAS PUERTAS DEL INFIERNO

También la influyente Confederación de Trabajadores del Transporte envió una advertencia al Gobierno. "Habrá que estar atentos a la evolución de los precios sobre el costo de vida. Históricamente las devaluaciones han golpeado el bolsillo de los trabajadores", expresó en un documento. Y continuó: "Queremos que el mismo tratamiento dado a los sectores agroexportadores e industriales se realice con los sindicatos. Sería bueno no repetir la política del parche de Cristina Kirchner con Ganancias porque después del pago del aguinaldo sigue la confiscación".

Quien  pintó un panorama apocalìptico, fue  el presidente de la Asociación de Estaciones de Servicio Independientes, Manuel García."Con la devaluación abrieron las puertas del infierno", dijo y vaticinó que el litro de nafta va a aumentar tar hasta los $20. El impacto en el bolsillo de la devaluación empujó a las cinco centrales obreras a una forzada unificación. Diferentes sindicatos de las tres CGT y de las dos CTA presionan en conjunto para obtener un bono de emergencia de fin de año para compensar la inflación y la caída del valor adquisitivo del salario tras la eliminación del cepo cambiario. El gobierno contestó que no lo hará por decreto, pero que si hay acuerdo con las cámaras empresarias, no tengrá problemas en homologar la cuestión.

Otro tema que Macri intuye que le va a llover  desde el cielo sindical, es la abultada deuda que mantiene el gobierno con las obras sociales. Se calcula que esos fondos ascienden a unos 26 mil millones de pesos. El Presidente, de aquí en más, deberá mostrar cintura. Tendrá que poner todo su esfuerzo para contener los precios .Será fundamental para aliviar el pedido de los gremios en las paritarias. Cifras muy altas en los convenios, dispararìan las alertas de los empresarios y podrían terminar en despìdos. 

LOS PRECIOS POR EL ASCENSOR

Las presunciones concretas en la nueva economìa marcan que los precios sufrirán mayores variaciones por la devaluación. Habrá una incidencia por la suba del dólar oficial, la eliminación de las retenciones y el encarecimiento del costo financiero de los créditos. El ministro Alfonso Prat Gay acordó con los empresarios retrotraer los precios al nivel de noviembre pasado. Pero es casi una utopía que en este país lo que subió, pueda bajar con la misma celeridad. Además, el funcionario ratificó que el Gobierno convocará el mes próximo a empresarios y sindicalistas para un acuerdo de precios y salarios. No obstante, ya se encendieron algunas alarmas en el universo gremial, porque el grupo Techint comenzó a despedir trabajadores.

Otro frente de preocupación está íntimamente vinculado a lo que pueda pasar con las tasas de interés. Se cree que los bancos las fijarán libremente para los plazos fijos y los préstamos que otorguen. Se descuenta que la anual podría bordear el 40%. La contracara será el mayor costo de los préstamos ya otorgados a tasas variables y sobre los nuevos créditos. Los impactos previstos se reflejarán además en los resúmenes de las tarjetas de crédito. En ese nicho, el costo de financiarse mediante la opción de pagar el monto mínimo, aumentará en la misma proporción que las tasas. El descubierto en cuenta corriente también será más costoso.

DATOS QUE HIELAN LA SANGRE

El reacomodamiento de las tarifas de luz y gas, la suba en algunos casos del impuesto inmobiliario bonaerense al 30% y el incremento en las patentes autotomores, son otras de las medidas que el bolsillo popular tendrá que afrontar en los próximos meses. Todo forma parte  del costo de la fiesta, con un Banco Central que fue liquidando paulatinamente los 56 mil millones de dólares de reservas con que contaba. El cepo jamás pudo cortar la fuga del torrente verde, causada por el mal manejo de las cuentas externas, la inexperiencia y la coerción sobre las fuerzas productivas. La inflación trepó a más del 30% anual, el déficit fiscal se multiplicó. Así, la Argentina entró en una recesión que dura hasta hoy.

Tan mal terminó la aventura del pequeño Axel Kicillof, que el gobierno de Cristina hasta debió interrumpir la publicación de las cifras de la pobreza, porque los indigentes eran demasiados como para exhibirlos en la vidriera de la "década ganada". Hay datos que hielan la sangre. Se perdieron más de u$s 20.000 millones de reservas desde que se comenzó a armar el rompecabezas de restricciones cambiarias a fines del 2011. Filtraciones como el dólar ahorro terminaron costando casi u$s 10.000 millones, por no hablar de esa resistencia de a pie que fue en estos años el tarjeteo en el exterior. La necesidad de bloquear importaciones resintió el nivel de actividad y las utilidades pisadas convencieron a las empresas de que era mejor no entrar a un lugar del que no podían salir.

INFLACION CERCANA AL 50%

Los dólares que ingresaban de la inversión se redujeron a un tercio. Ahora los desafíos pasan por dos frentes. ¿Podrá Macri defender una cotización en torno a los $ 15 sin que el mercado lo doblegue en la pulseada? Los dólares cosechados en estos pocos días dan pie a pensar que sí. ¿Y podrá moderar el traslado a precios de la corrección en el tipo de cambio? Ya hay analistas que vaticinan una inflación cercana al 50% para mediados del 2016. La gran pulseada para el Presidente será convencer a los gremios de negociar acuerdos por debajo del 40%, mirando la inflación esperada y no lo que ocurra en estos primeros meses. Si Macri hace bien los deberes, tendrá la posibilidad de recuperar simpatías con Moyano y volver a ser el "compañero" Presidente. Ya dio el primer paso sin anestesia. Cuanto antes duela, más ligado quedará el golpe a la herencia que dejó el gobierno que se fue. 

Jorge Joury es licenciado en Ciencias de la Información, graduado en la UNLP. Su correo electrónico es[email protected]. Para consultar su blogs, ver: Jorge Joury De Tapas.

OPINÁ, DEJÁ TU COMENTARIO:

NEWSLETTER

Suscríbase a nuestro boletín de noticias

VIDEOS