No es culpa del paro
Llorar en el aula vacía: una escuela de Ignacio Correas no tuvo clase por falta de alimentos, agua y artículos de limpieza
Lo contó en su cuenta de Facebook, sumida en la tristeza la mamá de una alumna. No fue por el paro, ocurrió por la desidia de las autoridades.
LA ESCUELA DE MI HIJA NO PUEDE EMPEZAR
Helena va a una escuela rural, en Ignacio Correas. Un escuela a la que acuden 104 nenes, doble jornada, 8 horas.
Hoy NO PUEDE EMPEZAR, no por el paro docente (en justo reclamo) sino porque el Estado no está enviando el AGUA, los ALIMENTOS y los insumos de limpieza para poder garantizar la comida y la estadía en la escuela.
La directora, angustiada por la impotencia, me decía que el conflicto es en toda la ciudad de La Plata (parece que ahora el Municipio es quien debe hacerse cargo de lo que antes hacía la Provincia) y en ese traspaso desorganizado como TODO, no previeron que las cosas tenían que estar para hoy.
Esto no lo van a decir en los diarios. Los medios hoy van a decir que los REHENES son los chicos, pero de los maestros. No van a decir que el ESTADO no está garantizando lo que es básico. No van a hablar de lo ilógico que resulta mandar 24 viandas para una escuela que tiene que darle de comer a 100 alumnos.
La directora me dijo que el viernes por la tarde, sin ya saber qué hacer, y esperando lo que no iba a llegar, se sentó a llorar en un aula, Me quedo con esa imagen: un docente llorando en un aula vacía. No es un golpe bajo. El golpe bajo lo dan ellos, SIEMPRE.
Si alguien de por aquí, gusta replicar la información, o quiere hacer una nota para contarlo en el medio en que trabaja lo que está pasando, o lo que sea que sirva para ayudar... me pongo a disposición. Y gracias!