La diputada se refirió al ataque en su oficina en la Legislatura bonaerense: “Está constatado por la policía científica y personal de la Cámara que entraron. No creo que sea un mensaje político para mí, no soy tan importante, soy una más, pero sí lo puede haber sido para Mario (Secco)”. González detalló que en las cámaras de seguridad del edificio “se ve que el sábado a las 11.50 de la mañana el sereno apaga las luces de los pasillos y cuando las apaga, las cámaras, en vez de activarse con el sistema infrarrojo, se produce un corte de energía en el primer piso, que es donde está mi despacho”. La legisladora destacó que pidió las cámaras del segundo y tercer piso y que las mismas “continuaron grabando bajo el sistema infrarroja”.

La ex secretaria de seguridad de Ensenada afirmó haber hablado con Manuel Mosca, presidente de la Cámara de Diputados, a quien le expresó: “Le dije a Mosca que no estoy tranquila con lo que pasó. Él me ofreció que personal de la Cámara podía revisar la oficina y le dije que no, que fuera alguien ajeno, por eso me dijo que contrate una empresa que la Cámara la iba a solventar”.

“Si bien no tengo nada que ocultar, quiero eliminar cualquier posibilidad que no haya quedado nada, no confío en nadie, menos en este gobierno”, finalizó.