En los últimos tiempos, el fiscal Romero se ha ganado un lugar en el escenario de la polémica cotidiana en las redes sociales. Sus intervenciones en twitter siempre generan reacciones y no pocos, echando mano al humor, lo señalan  como el Miky Vainillia platense.

En ese contexto, Romero defiende todo lo que tenga que ver con la llamada mano dura y se muestra crítico al garantismo y algunas figuras de la defensa de los DDHH como Hebe de Bonafini, entre otros.

Más allá de las chanzas, lo cierto es que hace rato el nombre del fiscal Romero genera ruido en el mundillo de la política local. Fue, por caso, uno de los "medidos" por el macrismo nacional cuando la candidatura a intendente de Julio Garro estaba más verde que la camiseta de Ferrocarril Oeste.

En los últimos tiempos el nombre de Romero sonó para un lugar clave en el gobierno de María Eugenia Vidal: en el ministerio de Seguridad.

Ahora, un grupo Pro que apoya la gestión Garro pero que ve con buenos ojos intentar otra opción del mismo proyecto, fogonea a Romero como candidato a intendente.

El ex director del Puerto La Plata, Mariano Penas, es uno de los que por estas horas meten leña a la caldera. CONTINUARÁ.