"Ronald Pablo Baroni Ambrosi, es un ex futbolista de Perú, nacido hace 55 años en la localidad de Lima, y luego de su alejamiento de la actividad profesional deportiva, se afincó en la Argentina y se dedicó a la representación de jugadores", arranca un informe periodístico que deja entrever supuestas irregularidades en materia impositiva y financiera que tendrían como escenario el lujoso country Abril.

"Este sujeto vive en el Campo de Polo Abril, sector Lote 33 en Hudson. No tiene actividad laboral, no registra actividad bancaria, por lo menos en los últimos 24 meses no tiene caja de ahorro ni cuenta corriente ni tarjeta de crédito", indica el informe publicado por la Agencia de Noticias NOVA que afirma que "la AFIP lo dio de baja en el 2007 por no presentar las declaraciones juradas ni pagar las cargas patronales".

El informe permite inferir que Abril podría estar siendo, del mismo modo que en su momento Nordelta, hábitat de personas sospechadas de vículos con el lavado de dinero.

"En su momento, el señor de orígenes peruanos tiene una firma llamada Agents Group S.A., para la compra y venta de jugadores de fútbol, fundada en el año 2003 y en la actualidad ya no existe, por no presentar las declaraciones juradas ni pagar las cargas patronales. Una casa similar en la que él viviría, cuesta 600 mil dólares. La gran pregunta es cómo hace, ya que no tiene un trabajo estable, no tiene empresas ni es comerciante, nada por el estilo. Baroni, ex jugador peruano y representante, quiso negar cualquier vinculación con las presuntas irregularidades en los pagos al ex lateral del Rayo Vallecano y compatriota, Luis Advíncula, ahora lateral derecho de Boca Juniors", señala el informe.

"Estoy ajeno a cualquier situación que no sea lógica. Sí llevé a Luis al Rayo, fue muy lindo verlo ir a España, después no intervine más en ninguna otra operación. Hice mi función de intermediario y nada más. Cuando hago una operación, yo cobro mi comisión, pero eso no tiene nada que ver con los salarios. Yo cobré la operación y punto, cada tema siguió adelante", comentó tratando de “aclarar” la situación allá por febrero de 2020.

Además, no solo se dedicó a representar a jugadores incaicos y argentinos, sino que también probó suerte con los africanos, interfiriendo en la negociación de Ake Loba, donde supuestamente el jugador se iría de San Martín de Porres hacia el Cruz Azul, en la liga mexicana.

El representante, naturalizado argentino, representa a Lucas Zelarayán, el argentino que juega en Columbus Crew de la MLS, y podría retornar a Tigres de Monterrey, donde estuvo y fue figura.

Como si fuera poco, el nombre del peruano también estuvo vinculado a la compra de un club mexicano, el Celaya. Los “Toros” aparentemente estaban siendo negociados por Ángel Reyna y Ronald Baroni, según la prensa de México.

El interrogante que aparece en estas situaciones, tiene que ver con que Ronald Baroni se encuentra alejado de las entidades bancarias y se desconoce cómo haría para recibir y realizar las transacciones con los clubes de fútbol. Habría que poner la lupa sobre él o sus testaferros, porque detrás de todo esto, alguien debe figurar, dice el informe.